Esta puente se convirtió en un sitio de visita ineludible en la capital Checa gracias a su belleza y a ese ambiente alegre y divertido que lo rodea. El Karlův Most en Praga, el puente popularmente conocido como Puente de Carlos es el largo puente peatonal y de piedras que atraviesa el río Vltava o Moldava.
Caminando sobre sus piedras, creo ver la postal de una tarde cualquiera, tal como se debe haber vivido en la lejana Edad Media.Debe su nombre al Rey Carlos IV que encargó su construcción en 1357. El tiempo parece haberse detenido en ese lugar.
El famoso puente está ubicado en un lugar estratégico de la antigua ciudad. Une el castillo de Praga y la Ciudad Vieja, la plaza y el Reloj Astronómico, también una celebridad. Es un punto de vista fabuloso sobre los edificios más antiguos de Praga. Un paisaje maravilloso, en una ciudad que se mantiene bien conservada a pesar de los siglos. Desde este lugar se accede a otro rincón mágico de Praga: la Isla de Kampa
Lo visité en otoño, pero lo imagino cubierto de nieve durante los meses del invierno. A pesar del tiempo bastante fresco, todos paseábamos encantados.


Pintores y algunos vendedores completaban los aires bohemios y artísticos de este pasaje encantador.
Sobre el Puente de Carlos, nos encontramos a menudo con músicos que creaban un clima de celebración. Eran acaso juglares de otras épocas? Para mi sí, porque me era fácil dejarme llevar por la imaginación.
Ahí mismo descubrimos una orquesta completa, cuya música todos disfrutamos.
A lo largo del recorrido encontré artesanos y pintores que exhibían su obra. Y precisamente los pintores llamaban la atención de los que paseaban para lograr que aceptaran posar para un retrato.
El puente de Carlos, el Karluv Most tiene en cada una de sus piedras la impronta de Praga, la capital de Bohemia. El Puente de Carlos está flanqueado por estatuas. Un punto muy visitado sobre el centro es la escultura de Juan Nepomuceno, de quien se dice fuera un mártir. Todos se dan cita en ese lugar porque dentro del conjunto, un pequeño perro ubicado al lado del personaje, tiene la fama de traer suerte a quien lo acaricie.
Por eso uno llega a preguntarse: acaso estoy en la Edad Media?
Pero cuando se observan las cámaras fotográficas de última generación aparece la respuesta: No, de ninguna manera!
Las paredes y muros de apoyo de los puentes tienen un color impregnado de mucho dramatismo!!! Me encantaron.
Saludos
Valery
parece un lugar precioso…, coincido con Valery
Un lujo de ciudad¡¡¡Saludos
Hoo! cuando podre conocer un lugar como este!!. Las fotos son mas que ilustrativas. Saludo!!