De paseo por el ghetto judío, uno de los barrios más especiales de la ciudad, lleno de significado y de historia, me puse a reflexionar sobre algunas cosas que tal vez sean evidentes en Roma. Esta es una ciudad encantadora en la que conviven perfectamente los vestigios de ese estado poderoso, el imperio que supo regir al mundo antiguo durante su apogeo, y la vida moderna y actual de sus habitantes.
Recorriendo las ruinas del Portico de Ottavia, descubrí esas pequeñas ventanas justo al lado. El pórtico del que les hablo es monumento fabuloso que el emperador Augusto le dedicara a su hermana menor y que se encuentra en muy buen estado de conservación.
En el Ghetto Judío de Roma resultaba admirable notar esas rejas prolijas, las cortinas con encajes y las flores. Era posible imaginar la vida cotidiana detrás de esas ventanas. Los habitantes, tomarán conciencia de estar viviendo en un lugar tan antiguo e importante? Ojalá que sí.
Quizás deban tolerar los ruidos de las frecuentes excavaciones y del movimiento cuidadoso de rocas, columnas, soportes, capiteles de este templo antiguo. Deben cumplir con reglas estrictas de cuidado. Pero, por el contrario, las molestias se deben a vivir en un lugar extraordinario.
It's wonderful to see the old and new working well together side-by-side! I enjoyed reading this very much. (Yes, I can read Spanish a little but cannot speak it anymore. Maybe I will learn again.)